México no hace lo necesario para proteger la labor periodística
Once periodistas han sido asesinados en lo que va de 2017.[1] Se estima que desde el año 2000 hasta la fecha han ocurrido 111 homicidios relacionados con la ocupación informativa de las víctimas: 22 de estos casos acontecieron en la presidencia de Vicente Fox, 48 durante el gobierno de Felipe Calderón, y 38 en la presente administración de Enrique Peña Nieto.[2]
Organizaciones como Artículo 19, Reporteros Sin Fronteras (RSF), y la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP), acentúan que la libertad de prensa en México se encuentra en una situación difícil debido a las numerosas agresiones hacia la seguridad y libertad de los periodistas que merman el pluralismo e independencia de los medios de comunicación en el país.[3]
Estas instituciones apuntan que durante este año se han contabilizado aproximadamente 326 atentados a periodistas a lo largo del territorio nacional: 111 amenazas, 66 intimidaciones, 56 ataques físicos o materiales, 28 privaciones de libertad, 24 acosos y hostigamientos, 9 intervenciones de las comunicaciones, 8 ataques a medios de comunicación, 6 intrusiones no autorizadas a instalaciones de medios o domicilios de periodistas, entre otros ataques a nivel nacional.[4]
En la Ciudad de México, se han presentado 79 de los 326 atentados registrados hasta la fecha. Si bien no se ha contabilizado ningún homicidio en lo que va del 2017, sí se han presentado 62 amenazas, 7 intervenciones de comunicaciones, 4 ataques a medios de comunicación, 3 ataques físicos o materiales, 2 intimidaciones, y una intrusión no autorizada.[5]
Dichas cifras muestran el escenario de inseguridad en que viven y ejercen su trabajo los comunicadores en México, cuya labor se ha convertido en una profesión de alto riesgo. Esta percepción es compartida por gran parte de los capitalinos que aseveran conocer la situación actual de los periodistas en la capital y en otros estados del país.
En la más reciente encuesta en vivienda realizada por Delphos-NU, entre el 71 y 79% de los entrevistados en la Ciudad de México afirma haberse enterado de los crímenes que han victimizado a periodistas. Esta opinión varía dependiendo del tipo de agresión por la que se pregunte, así como por el cuestionamiento del lugar donde los atentados han ocurrido.
En lo referente a los asesinatos a comunicadores, el 78% de los capitalinos asegura estar enterado de homicidios en otras entidades del país. En menor medida, el 75% dice conocer que en la CDMX también se han presentado este tipo de delitos.
No obstante, esta última opinión no coincide con los conteos de los organismos internacionales, ya que en el último año no ha habido registro de periodistas muertos en la capital. Es posible que la respuesta de la población esté relacionada con el homicidio del fotoperiodista Rubén Espinosa, cuyo cuerpo fue hallado en una vivienda de la colonia Narvarte a finales de julio de 2015.[6]
En cuanto a secuestros, el porcentaje de conocimiento de los capitalinos no difiere mucho al indagar si estos se han dado en la CDMX (72%) o en otras entidades del país (73%). Ocurre algo similar al preguntar si los ciudadanos se han enterado de la censura de periodistas; el 76% declara que este tipo de ataque a difusores de la información se ha dado en la ciudad, y 72% asegura saber que, al igual que en la CDMX, se censura a periodistas en otros estados.
Cabe mencionar que, se observa una diferencia considerable de 8 puntos porcentuales al examinar las opiniones respecto a las amenazas a comunicadores en la capital (79%), y en otras entidades (71%).
Responsables de los crímenes hacia periodistas
Datos de Articulo 19 concluyen que, de los 276 atentados registrados hasta junio de 2017, el 50.7% han sido cometidos por funcionarios públicos, 11.6% por grupos del crimen organizado, mientras que 6.2% acusan a miembros de partidos políticos, 10.1% se han dado por motivos entre particulares, y 21.4% no tienen agresor definido hasta el momento.[7]
Delphos-NU obtuvo respuestas similares al cuestionar a la población por los posibles responsables de los ataques a los periodistas: 26% opina que las autoridades de gobierno son quienes más atentan contra el trabajo de los comunicadores, 14% responsabiliza a la delincuencia organizada, 11% especifica que el narcotráfico es la causante, 1% menciona a los empresarios, y 5% desconoce las razones de las muertes. Cabe destacar que el 37% de los entrevistados considera que no hay un solo autor de los ataques a periodistas, sino que tanto las autoridades, como los grupos del crimen organizado, al igual que los partidos y empresarios, son responsables de los crímenes contra los trabajadores de la comunicación.
Protección e impunidad
En víspera del Día Internacional para Acabar con la Impunidad de Crímenes contra Periodistas (IDEI, por sus siglas en inglés), que se conmemora cada 2 de noviembre desde el año 2013,[8] el Comité para la Protección a Periodistas (CPJ, por sus siglas en inglés) informa que este 2017 México ocupa el sexto lugar en el Índice Global de Impunidad.[9]
El informe del CPJ publicado cada año, para no olvidar este tipo de ataques, estima que el puntaje de impunidad del país aumentó 142% durante el último decenio a pesar de no aparecer en el índice durante los 10 años de publicación de este estudio. Asimismo, el índice responsabiliza a los 12 países del ranking, incluyendo a México, de casi el 80% de los asesinatos no resueltos que ocurrieron en todo el mundo de 2007 hasta el 31 de agosto de 2017.[10]
Desde 2012, el incremento de la violencia hacia los comunicadores atrajo la atención de organizaciones internacionales como la UNESCO, quien instó a las autoridades mexicanas a investigar el origen de las agresiones y a tomar medidas que permitieran ejercer la libertad de expresión y de prensa, las cuales son fundamentales para el estado de derecho y la democracia en México.[12]
A juicio de la mayoría de los capitalinos las autoridades no están haciendo lo indispensable para salvaguardar a los comunicadores. En la encuesta CDMX de Delphos-NU, el 82% de la población entrevistada se muestra incrédula ante las acciones de protección al afirmar que el Estado mexicano no está haciendo lo necesario, para garantizar la seguridad de los periodistas en su tarea informativa.
Aunada a la opinión de los capitalinos, la Clasificación Mundial de la Libertad de Prensa 2017 elaborada por Reporteros Sin Fronteras (RFS), considera que en México se ha hecho poco por frenar las “violaciones a la libertad de informar”, de ahí que ocupe el lugar 147 de 180 en el respeto y procuración de derechos como la libertad de prensa.[13]
Sin embargo, RSF en su reporte destaca que la libertad de prensa podría dar un giro, ya que la edición 2017 de la clasificación mundial revela que las violaciones a la libertad de informar ya no son exclusivas de los regímenes autoritarios y de las dictaduras; cada vez más se multiplican los ataques a periodistas en las democracias poniendo en duda el adecuado funcionamiento de estos regímenes.[14]
Al igual que RSF, el informe 2017 del Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ) señala que en México han sido asesinados 21 periodistas con “absoluta impunidad en el pasado decenio”, de 2007 a 2017. [15] El CPJ indica que, si bien se han dado avances como el compromiso del presidente Enrique Peña Nieto de combatir la impunidad por el asesinato de periodistas, también se han presentado retrocesos[16] como los 11 homicidios de periodistas contabilizados en lo que va de este año.
Las cifras de periodistas asesinados y violentados -de alguna u otra forma- son alarmantes, y tanto organizaciones locales como a nivel mundial cuestionan con datos concretos los avances en el cumplimiento de los compromisos, adquiridos por las autoridades mexicanas, de proteger y garantizar la seguridad de los periodistas, así como de combatir la impunidad de los crímenes de los que han sido víctimas.
De continuar con esta situación es posible que no solo el gremio periodístico, la libertad de prensa y el derecho a la información se vean diezmados, sino también la democracia en México, la cual en fechas recientes parece haber desilusionado a toda la población.[17]
contacto@delphos.nu
[1] En lo que va del 2017, Reporteros Sin Fronteras (RSF) han registrado 11 asesinatos de periodistas en México. https://rsf.org/en/barometer?year=2017
[2] Las organizaciones Artículo 19 (Article 19) y la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) llevan sus propios registros de asesinatos de periodistas, pero la falta de resultados en investigaciones limita la relación directa de algunos homicidios de periodistas con su labor informativa lo que dificulta tener una cifra exacta. Sin embargo, se utilizaron los registros de Artículo 19 porque la información que posee fue obtenida del último informe estadístico de la Fiscalía Especial para la Atención de Delitos Cometidos contra la Libertad de Expresión, de junio de 2017. http://froji.mx/amenazas-muerte-e-impunidad-periodismo-mexico y http://www.eluniversal.com.mx/nacion/sociedad/senala-sip-escalada-de-violencia-contra-la-prensa-en-mexico
[3] CLASIFICACIÓN MUNDIAL 2017 de la Libertad de Prensa | ¿Un gran giro? http://www.rsf-es.org/news/clasificacion-mundial-2017-de-la-libertad-de-prensa-%7C-%C2%BFun-gran-giro/
[4] https://mapa.articulo19.org/#!/principal/2017/nacional
[5] https://mapa.articulo19.org/#!/principal/2017/ciudad-de-mexico
[6] http://www.eluniversal.com.mx/articulo/metropoli/2015/08/1/un-periodista-entre-los-muertos-de-la-narvarte
[7] Primer semestre de 2017: 1.5 agresiones diarias contra periodistas en México. Artículo 19, 17 de agosto de 2017. https://articulo19.org/informesemestral2017/#_ftn1
[8]En memoria de los periodistas franceses asesinados en Malí el 2 de noviembre de 2013, la Asamblea General de las Naciones Unidas, proclamó esa fecha como el «Día Internacional para Acabar con la Impunidad de Crímenes contra Periodistas» (IDEI). https://en.unesco.org/endimpunity-2017/about-international-day-end-impunity | Asesinados a tiros dos periodistas franceses secuestrados en el norte de Malí. El País, 02 de noviembre de 2013. https://elpais.com/internacional/2013/11/02/actualidad/1383414551_209423.html
[9] El Índice Global de Impunidad del CPJ se centra en los países donde asesinan a periodistas y donde los responsables continúan impunes. https://cpj.org/es/2017/10/la-impunidad-por-el-asesinato-de-periodistas.php#more
[10] Ídem.
[12] México: UNESCO condena asesinato de periodista Adrián Silva en Puebla. Centro de noticias ONU, 21 de noviembre de 2012. http://www.un.org/spanish/News/story.asp?NewsID=25034#.UX7ZhaKQWup
[13] http://www.rsf-es.org/news/clasificacion-mundial-2017-de-la-libertad-de-prensa-%7C-%C2%BFun-gran-giro/
[14] CLASIFICACIÓN MUNDIAL 2017 | ANÁLISIS | El periodismo, debilitado por la erosión democrática. http://www.rsf-es.org/news/clasificacion-mundial-2017-analisis-el-periodismo-debilitado-por-la-erosion-democratica/
[15] Para este índice, el CPJ examinó asesinatos de periodistas que ocurrieron entre el 1 de septiembre de 2007 y el 31 de agosto de 2017 y que permanecen sin resolución. https://cpj.org/killed/americas/mexico/
[16] https://cpj.org/es/2017/10/la-impunidad-por-el-asesinato-de-periodistas.php#more
[17] Desilusiona en México la Democracia. http://www.elfinanciero.com.mx/nacional/en-mexico-cae-15-puntos-el-apoyo-a-la-democracia-pasa-de-71-a-56-en-un-ano.html
Sismos mueven el debate del financiamiento a partidos
A raíz de los sismos del pasado mes de septiembre en la opinión pública se reactivó el debate acerca del modelo de financiamiento a los partidos políticos en el país. Ante la necesidad de llevar a cabo los trabajos de reconstrucción en las zonas afectadas, lo cual costará 48 mil millones de pesos según datos de gobierno,[1] se considera que una forma de obtener el dinero es reduciendo el monto destinado a los partidos políticos, campañas electorales y a la mismo Instituto Nacional Electoral (INE).
En este contexto, Delphos-NU llevó a cabo una encuesta en vivienda en el mes de octubre con el objetivo de conocer la opinión de los capitalinos al respecto y, al mismo tiempo, aportar algunos elementos a este debate.
La búsqueda por acotar el nivel de financiamiento público que reciben los partidos no es nueva. Sin embargo, después del temblor del 7 de septiembre algunos personajes políticos, como Armando Ríos Piter y López Obrador,[2] propusieron que parte de los recursos asignados a la campaña electoral del siguiente año se utilizara para ayudar a los damnificados de Oaxaca y Chiapas, principalmente. Estas propuestas no fueron lo suficientemente discutidas ya que una semana después vino el siguiente temblor.
A raíz del sismo del 19 de septiembre, en redes sociales y por medio de la plataforma change.org [3] se demandó a los partidos políticos dar a los afectados los casi 7 mil millones de pesos que recibirán en 2018.[4] En el mismo sentido, se agregaron exigencias para que el INE también renunciara al financiamiento público que percibirá.
De acuerdo con datos de la última encuesta en vivienda de Delphos-NU la propuesta de destinar los recursos de los partidos y del INE, para ayudar a los afectados por los sismos fue conocida por el 74% de encuestados.
La demanda vertida a través de redes sociales ha sido una de las más importantes en la plataforma change.org[5] y no pasó desapercibida para los personajes del espectro político, quienes, en opinión de diversos especialistas, no tardaron en utilizar la petición para tratar de sacar beneficio partidista.[6] De esta manera, días después el Partido Revolucionario Institucional (PRI) renunció al dinero que le resta por recibir este año, 258 millones de pesos,[7] y exigió a los demás partidos hacer lo mismo. En contra parte, los demás partidos respondieron con diversos posicionamientos y acciones. Unos a favor de crear un fideicomiso, como el caso del Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA),[8] y otros anunciando que renunciarían al 100% de sus prerrogativas, como Movimiento Ciudadano (MC). El Partido Acción Nacional (PAN) y el Partido de la Revolución Democrática (PRD), incluso recortaron personal para obtener recursos.[9]
Sin embargo, los planteamientos de los partidos pasaron desapercibidos por los ciudadanos, pues al momento evaluar el origen de las propuestas impera el desconocimiento. El 28% de los entrevistados no supo identificar de dónde o de quién vino esta exigencia. En segundo lugar, el 26% de los entrevistados considera que fue la sociedad civil quien impulsó la demanda. Le siguen, el 23% de las opiniones que señalan a los medios de comunicación como el origen de dichas peticiones.
En este mismo sentido, al preguntar a los ciudadanos qué partido político ha hecho más por ayudar a los damnificados por los sismos, la opinión efectiva del 40% de los capitalinos muestra que ninguno lo ha hecho. Muy atrás, en el segundo lugar, se considera que Morena ha sido quién ha hecho más, con 7% de opinión efectiva.
Malestar con los partidos y gasto electoral
Los partidos políticos en México son entidades de interés público, así lo establece la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos (CPUM) en su artículo 41. El objetivo de esto es que por medio de ellos los ciudadanos puedan participar en la vida democrática del país y acceder a los puestos de representación popular. En este sentido, cumplirían con la función de ayudar a conformar una representación política de la sociedad en los poderes del Estado.
Para el 2017 se presupuestó a los partidos poco más 4 mil millones de pesos de acuerdo con cifras del INE.[10] Del total, el PRI obtiene un 25.5%; al PAN le corresponde un 19.3%; mientras que al PRD y a MORENA un 11.5% y 9.7% respectivamente.[11] Por su parte, el INE para el 2017 obtuvo recursos equivalentes al 0.3% del Presupuesto de Egresos de la Federación.[12]
El estudio preguntó a los ciudadanos si el INE y los partidos deberían o no renunciar al presupuesto público que reciben. La mayoría de los entrevistados, entre el 90% y 93%, opinan que estos organismos sí deberían renunciar a cierta parte de los recursos públicos.
Los puntos de vista están divididos respecto al porcentaje del presupuesto al que debe renunciar cada institución. Sin embargo, una parte considerable de los entrevistados, entre 46% y 51%, están a favor de que tanto el INE como los partidos renuncien al 100% del financiamiento público, respectivamente.
Pese a que existe un descontento con el modelo de financiamiento del sistema electoral y de partidos mexicano, los partidos no han podido capitalizar las demandas que la ciudadanía plantea después de los sismos de septiembre. Ejemplo de ello es que más de la mitad de los entrevistados considera que ningún partido ha hecho mucho para ayudar a los afectados por el sismo, incluso cuando estos tomaron como bandera el tema del financiamiento público a los partidos.
Es necesario seguir indagando si los ciudadanos rechazan en sí el financiamiento público o, por el contrario, es la cantidad de dinero que se destina al sistema electoral lo que les causa malestar. De igual forma, es importante investigar si los ciudadanos conocen la lógica del financiamiento que los partidos reciben. En México al ser éstos de interés público se busca que el acercamiento sea principalmente con la ciudadanía y no con grupos de interés económicos.
El caso de la constructora brasileña Odebrecht[13] representa un ejemplo de la penetración del dinero privado en la política a cambio de la obtención de beneficios. México no se encuentra ajeno a este escándalo de corrupción.[14] Situaciones como esta y las generadas por los sismos muestran la necesidad de incluir en el debate a la ciudadanía.
contacto@delphos.nu / Omar Diaz V. @odiaz
[1] http://www.eluniversal.com.mx/nacion/sociedad/reconstruccion-por-sismos-costara-48-mil-millones-de-pesos [2] http://www.animalpolitico.com/2017/09/partidos-sismo-chiapas-oaxaca/ [3] https://www.change.org/p/inemexico-donar-los-casi-7-000-millones-de-los-partidos-pol%C3%ADticos-a-v%C3%ADctimas-del-sismo-7-sep-y-19-sep [4] http://www.eluniversal.com.mx/nacion/politica/partidos-gastaran-6-mil-788-millones-en-2018 [5] http://www.milenio.com/tendencias/peticion-ine_recursos_publicos-change_org-partidos_politicos-terremoto-mexico-milenio_0_1034896620.html [6] http://wradio.com.mx/programa/2017/09/26/asi_las_cosas/1506435407_858009.html [7] http://www.animalpolitico.com/2017/09/partidos-politicos-autoria-dinero-publico/ [8] http://www.milenio.com/politica/sismo_19_de_septiembre_de_2017-morena-amlo-fideicomiso-partidos-milenio-noticias_0_1036696718.html [9] http://www.eluniversal.com.mx/nacion/politica/despidos-y-ahorro-en-partidos-para-ayuda-por-sismo [10] http://portalanterior.ine.mx/archivos3/portal/historico/recursos/IFE-v2/DEPPP/PartidosPoliticosyFinanciamiento/DEPPP-financiamiento/financiamientopublicopartidosnacionales/financiamiento-publico-97-17.pdf [11] Se considera únicamente las prerrogativas a nivel federal. Los partidos también reciben financiamiento público local, el cual se eroga a partir de los presupuestos estatales. [12] http://bibliodigitalibd.senado.gob.mx/bitstream/handle/123456789/3690/reporte_48_2709.pdf?sequence=5&isAllowed=y [13] http://www.bbc.com/mundo/noticias-america-latina-38905411 [14] https://www.nytimes.com/es/2017/08/15/odebrecht-mexico-emilio-lozoya-pemex-corrupcion/
Política de las emociones. ¿Qué mueve al Mexiquense rumbo al 2017?
Política de las emociones. ¿Qué mueve al mexiquense rumbo al 2017?
Por décadas han dominado las premisas del votante racional para la predicción y el análisis del voto en nuestro país. La hipótesis del votante racional es elaborada originariamente por Anthony Downs (1957) y parte del axioma de que los ciudadanos actúan racionalmente en política y siguen el mismo criterio que en economía, evaluando costos y beneficios, a la hora de tomar una decisión.
Sin embargo, esta visión ha quedado corta para llegar a una comprensión del comportamiento del electorado. La emoción ejerce un impacto en las decisiones políticas de manera decisiva y significativa. Si bien su importancia en la ciencia política ha sido frecuentemente descartada o bien ignorada en favor de las teorías que privilegian el razonamiento racional, la emoción puede proporcionar una forma alterna para ver y explicar los escenarios probables de la elección y la acción política.
Los recientes avances en las neurociencias ofrecen nueva información sobre cómo funciona el cerebro y cómo interactúan el cuerpo y la mente. Estos resultados han sido retomados en la psicología política que reconoce las implicaciones importantes que tienen para el análisis de la toma de decisiones, como es la emisión del voto.
En relación con lo anterior, se han realizado diversos estudios en los que se pone de manifiesto la relevancia que cobran emociones específicas cuando de votar se trata. Marcus G., y Mackuen G. (2007), han considerado dos tipologías emocionales relativas a la ansiedad y el entusiasmo, que permiten dilucidar la actuación de los votantes. En lo que respecta a la ansiedad se presenta una aversión a lo que se identifica riesgoso y como consecuencia se atienden contenidos políticos y por ende la apertura a nueva información. Por otro lado el entusiasmo inclina la balanza hacia la identificación partidista, la concentración en un candidato y el involucramiento político.
De este modo, el análisis de los datos obtenidos a través de la medición más reciente realizada por Delphos en el Estado de México entre el 1 y 3 de julio, indica que los sentimientos negativos (repugnancia, enojo, miedo y nervios) de los mexiquenses ante las próximas elecciones y hacía los partidos PAN, PRD y MORENA se presentan en frecuencias cuasi idénticas (56 %, 57 %, y 55 % respectivamente), mientras que el PRI obtiene solo 48 %.
El mismo patrón se observa para los sentimientos positivos, donde PAN obtiene 30 %, seguido por PRD con 29 %, y MORENA con 28 %. En este caso el PRI es asociado por el 42 % de los encuestados con sentimientos positivos. Para este mismo partido el sentimiento predominante es la simpatía con 21 %. Comparado con los otros partidos el PRI presenta un índice mayor de orgullo en los mexiquenses (12 %) mientras que no sobresale en el sentimiento de esperanza.
Se observa que existe mayor nerviosismo hacía los partidos con orientación política de izquierda (PRD 13 % y MORENA 15 %) en comparación al PAN (4 %) y al PRI (3 %).
La misma encuesta de Delphos muestra que el 54 % de los mexiquenses, tiende a mostrar una actitud reticente al cambio. Quizás esto refleja el hecho que el Estado de México no ha tenido alternancias a nivel estatal. Sin embargo un 38 % tiene una postura positiva hacía un cambio político para el siguiente proceso electoral.
Las preocupaciones de los mexiquenses y el reto para el próximo gobernador
La Encuesta Nacional de Victimización y Percepción sobre Seguridad Pública (ENVIPE) 2015 dan cuenta de que en el Estado de México, en el 2014 por cada 100 mil habitantes hubo una incidencia delictiva de 83.5, cuando la media nacional se ubicó en 41.6.[1]
La encuesta Delphos muestra que un gran número de encuestados siente temor respecto de ser víctima de un delito (72%), siendo de más del 32% quienes dicen tener mucho temor, en una escala del 1 al 10.
La incertidumbre por el futuro personal y familiar también se eleva del nivel seis al diez en un 67 %, y del rango total, el nivel máximo de incertidumbre obtuvo el 25% de las respuestas.
Así, ante la percepción de temor e incertidumbre, un candidato que muestre firmeza de carácter incrementaría su base de apoyo (50%) en comparación con aquellos que sean percibidos como innovadores, amigables/incluyentes o críticos.
Durante las campañas del pasado proceso electoral algunos candidatos, en estados como Chihuahua y Veracruz, prometieron encarcelar a los actuales gobernadores de llegar ellos al poder.[2] En el caso del Estado de México, Delphos preguntó respecto a la confiabilidad que un gobierno tendría si castigará a políticos. Al respecto un 51% dijo confiar en un gobierno que hiciera esto.
A raíz del castigo a exgobernadores el análisis postelectoral hace hincapié en lo difícil que puede llegar a ser sostener este tipo de propuestas, pues la justicia no está sujeta a la voluntad de un gobernador ni depende exclusivamente del poder ejecutivo; por lo que este tipo de afirmaciones, de no cumplirse, podrían repercutir de manera negativa tanto en el partido y el político que las proponen.
A partir de los resultados de la primera encuesta electoral Delphos en el Estado de México, se podría inferir que un candidato/partido ganará más simpatizantes en la entidad si muestra firmeza y lo hace a través del castigo para instaurar justicia. Ante las sensaciones de temor e incertidumbre se deben tomar medidas que disminuyan la percepción de riesgo y amenaza en el electorado.
Cuando la sensación de simpatía y orgullo hacia un partido es mayor que la percepción de temor, se genera una mayor participación e identificación partidista. En este sentido el PRI lleva la delantera en la preferencia del electorado, pues genera mayor simpatía y sentimiento de orgullo. Aun cuando comparte los mismos niveles de miedo que se asocian con los demás partidos
Por otro lado se observa que el nerviosismo del electorado ante el triunfo del PAN y PRI, es menor respecto a un triunfo de los partidos denominados de izquierda (PRD y MORENA).
Con estos datos, el PRI aparece como el contrincante a vencer, pero ¿por cuál partido? Este es el dato interesante. PAN y PRD tienen un 15% de sensación de simpatía por parte del electorado, contra un 21% del PRI. Por otro lado, el nerviosismo que genera un gobierno panista es del 3% contra un 4% priista. Así, las emociones vinculadas con el PAN se traducen también en entusiasmo partidista y en época de alianzas (se ha presentado con gran éxito el dúo PAN-PRD) y noticias de última hora, el repunte de aquellos que con bajo perfil han navegado, es una opción latente que puede superar la tendencia a permanecer en un estatus quo político.
*Para cualquier duda o comentario contacte a:
mfurnsinn@delphos-nu.com
[1] http://www.inegi.org.mx/est/contenidos/proyectos/encuestas/hogares/regulares/envipe/envipe2015/doc/envipe2015_presentacion_nacional.pdf
[2] http://expansion.mx/politica/2016/05/03/carcel-al-gobernador-la-promesa-de-moda-en-las-campanas-de-oposicion ReferenciasDowns, A. (1957) An Economic Theory of Democracy. New York: Harper and Row
Marcus, G., Neuman, R., Mackuen, M. (2007) Inteligencia afectiva y juicio político. En Sociológica, Vol. 22, No. 63, pp. 253-266
Marcus, G., Mackuen, M. (1993) Anxiety, Enthusiasm, and the Vote: The Emotional Underpinnings of Learning and Involvement During Presidential Campaigns. En The American Political Science Review, Vol. 87, No. 3, pp. 672-685
Estado de México, última parada al 2018
Estado de México, última parada al 2018
Apenas concluido el proceso electoral de junio pasado las baterías de los partidos ya se enfocan en las elecciones locales del 2017, el penúltimo paso de cara a la elección presidencial del 2018. Coahuila, Nayarit y el Estado de México, son los tres estados que renovarán gubernaturas el siguiente año y, en conjunto, representan casi un 17% del total de la lista nominal nacional. De ellos tan sólo al Estado de México corresponde un 13%, el equivalente a casi 11 millones de electores. Un gran capital político y poder de negociación para el partido y el político que logren hacerse con la victoria.
Con estos datos se entiende que el Estado de México sea el centro de atención en la elección del 2017, sin embargo, su importancia no radica exclusivamente en el terreno electoral sino también en el del sistema político. En este estado se configura una interesante correlación de fuerzas, no sólo entre partidos sino también dentro del mismo PRI.
Al Interior del partido las figuras de Enrique Peña Nieto y Eruviel Ávila Villegas, actual gobernador del Estado, serán las cabezas que determinen la elección del candidato. Por ello los activos y negativos de cada una de estas figuras pesarán en quién abandere al PRI en el 2017.
Por un lado, Peña Nieto arrastra los mayores márgenes de desaprobación nacional que un presidente ha tenido desde que existen mediciones de este tipo[1]. Sin embargo, éstos no resultan tan desfavorables entre los mexiquenses. En la última medición de Delphos, levantada en el Estado de México entre el 1 y el 3 de julio, la aprobación que obtiene como presidente llega a 43%. ligeramente por encima de la que Eruviel Ávila tiene como gobernador con un 39%.
La sombra de una posible alternancia
Las elecciones del pasado 5 de junio arrojaron cuatro nuevas alternancias a nivel estatal con lo cual se reducen a cinco el número de estos estados: Campeche, Coahuila, Colima, Estado de México e Hidalgo. En el caso del Estado de México suman más de 80 años de gobiernos priistas, no obstante, lo anterior un 24% de la población del estado cree que ha sido gobernada por un partido distinto al PRI; mientras que un 11% desconoce si ha existido o no alternancia en el estado.
Respecto al dato anterior, de las personas que creen que han sido gobernadas por un partido distinto al PRI, el 51% cree que el PRD ha gobernado en algún momento la entidad, mientras que un 37% considera que ha sido el PAN.
A partir de los pasados resultados electorales Durango, Quintana Roo, Tamaulipas y Veracruz por primera vez serán gobernados por candidatos no postulados por el PRI. De ellos solo en Tamaulipas el candidato ganador no fue postulado por la coalición PAN-PRD. Estos resultados han puesto sobre la mesa nuevamente la posibilidad para que estos dos partidos conformen una coalición capaz de derrotar al PRI, lo cual no sería un asunto menor considerando que esto se evitó cuando en el 2010 el PAN se comprometió con el PRI a no conformar una a cambio de que este último aprobara el paquete económico federal de ese entonces.[2]
No obstante, al día de hoy pareciera no existir una moneda de cambio capaz de evitar este escenario; al contrario, una derrota para el partido del presidente en su cuna política sería un duro revés al PRI en la carrera presidencial, por lo cual es el incentivo principal para una alianza, aunque esto no significa que pueda ser exclusiva entre PRD y PAN. En la última medición de Delphos, el porcentaje de la población que considera que el PRD debe ir en alianza con el PAN es del 23%, mientras quienes consideran que debería hacerlo con MORENA es de 49%, seguida en segundo lugar de un 31% que considera que debería hacerlo con Movimiento Ciudadano.
Si se consideran los márgenes de las últimas tres elecciones a gobernador, los porcentajes de votación del PAN y el PRD en conjunto superan los porcentajes obtenidos por el PRI en 1999 y 2005; mientras que para el 2011 no logran superar el 62% de la votación obtenida por Eruviel Ávila.
Para el caso de una alianza de cara a la elección de gobernador la población del estado, a diferencia de lo que sugieren los resultados electorales pasados, considera que una alianza entre PRD y PAN tendría menores posibilidades de ganarle al PRI, 26%, mientras que las del PRD y MORENA serían mayores, 38% de acuerdo con el dato de Delphos.
El proceso electoral del Estado de México iniciará formalmente en septiembre y a poco más de un año de la elección, el comportamiento electoral de los mexiquenses se encuentra de la siguiente manera: identidad partidista PRI, 36%; PRD, 15% y PAN, 10%. MORENA, pese a su corta vida partidista obtiene un 9%; aunque el margen de quien dice no identificarse con ningún partido político es del 17%.
Al día de hoy, el PRI, 30% puntea las preferencias de intención de voto para la elección a gobernador con 16 puntos de ventaja sobre el segundo lugar, PRD, 13%. Mientras que MORENA y el PAN se encuentran en un empate virtual, 8% y 7% respectivamente.
Aún faltan varios meses y los números pueden cambiar. Como es bien sabido, los tiempos políticos no siempre coinciden con los tiempos legales, por lo cual desde ahora ya suenan posibles aspirantes en cada uno de los partidos. En la siguiente entrega del miércoles se analizará el posicionamiento de los políticos que podrían ser los próximos candidatos a la gubernatura del estado, así como el tipo de candidato que consideran adecuado los mexiquenses de acuerdo a la problemática que perciben.
[1]http://internacional.elpais.com/internacional/2016/04/13/mexico/1460563082_994180.html [2] http://www.jornada.unam.mx/2010/03/05/politica/003n1pol